Capítulo 353 Quedarse a dormir una noche
La mujer sollozaba ante la fría lápida, como un pájaro herido.
Tenía un hermano y había sido mimada desde joven. Cuando fue encarcelada, su hermano se esforzó por protegerla, e incluso vendió su riñón en el mercado negro sólo para asegurarse de que pudiera dar a luz a su hijo sin problemas. Tenía un hermano que la quería mucho, y nunca tuvo que estar celosa de nadie más. Arturo se quedó atónito antes pararse a su lado, pero no sabía cómo consolarla. Seguramente se sintió triste al ver la interacción íntima entre su hermana y él, y por eso vino a hablar con su difunto hermano en medio de la noche.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread