Capítulo 251 ¡Rápido, sálvala!
El viento pasó silbando por delante de los oídos de Sofía, y lo siguiente que supo fue que la boca ensangrentada y abierta que era el vasto océano la envolvía en las profundidades de su frialdad. En cuestión de segundos, el mar se tragó su delgado y frágil cuerpo.
El tiempo era frío, y Sofía se sintió como si estuviera aplastada por la presión helada del agua del mar. El frío del mar era como un puñal que se clavaba en su cuerpo, y el agua del mar le llegaba directamente a la nariz.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread