Capítulo 26 Un ligero error
Sam miró con atención la receta que había conseguido por su teléfono. Era un tipo de sopa de mariscos; algo que jamás había hecho y ni se le ocurría hacer, pero se atrevería a hacerlo solo para impresionar a su hermana. No sabía cómo se llamaba, pero había comprado todos los ingredientes y tenía la receta paso a paso. No podía ser tan difícil.
Se enfrascó durante alrededor de tres horas dentro de la cocina, tomándose unas cervezas mientras limpiaba los asquerosos camarones y preparaba la olla para la sopa. Mientras terminaba de picar algunas verduras escuchó como la puerta se abría y se cerraba tras los pasos de unos tacones que se acercaban a la cocina. Su hermana entró poco después, unas gotas de sudor sobre su frente y encima de su labio inferior, que secó con la manga de su chaqueta mientras se la quitaba. Sam le saludó con una sonrisa mientras le ofrecía un refresco de la nevera. Él le tenía una regla a ella: podría beber cuando tenga dieciocho. Lo que significaba que, mientras tuviera diecisiete, ni siquiera podría probar el olor de la cerveza. Al menos no frente a él.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread