Capítulo 10 Nunca hay que ir a un hospital

Faith se sintió inmediatamente mal por Hashmal. Lo invitó a sentarse en un banco de metal en mitad del parque. Faith recordó la forma en que se sintió cuando cayó: ese sentimiento de pesar, de pérdida, que ni siquiera sabes por qué lo sientes o cuánto tiempo va a estar. Pero está allí, y tienes que aprender a vivir con ello. Posteriormente lo superará, porque todos los humanos viven con aquel dolor permanente, contrario a los seres que están Nirvana. Pero mientras él esté aquí en la tierra y su corazón se sienta así de quebrado, Faith estará allí para él así como estuvo para Grace cuando ella llegó echa una bola de nervios. – Bueno, Hashmal, si necesitas hablar de algo con alguien, estoy yo aquí siempre para escucharte –le sonrió con todo el carisma que pudo, pero la sonrisa triste de Hashmal no cambió–. O con Grace, si lo deseas. Estaremos aquí para ti en todo momento.