Capítulo 1831 Sin salida
—Tu madre siempre me quería decir lo que pensaba. De hecho, me comió la cabeza durante años cada vez que me veía sin ninguna buena razón. Entonces, tu padre intentó acostarse conmigo mientras que tu abuelo no dejaba de hacerme daño. ¡Pero tú! ¡Tú me hiciste más daño que nadie! Me diste todo solo para arrebatármelo más tarde. Además, ¡me robaste mi privilegio de ser madre! A veces me pregunto si verdugos como vosotros son atormentados por vuestras propias pesadillas cada noche. ¿Puedes oler la sangre que cubre tus manos? Mis padres eran buenas personas y mi hermano… Iba a ser el hijo predilecto de la ciudad de Haicheng, la estrella naciente más reluciente de la ciudad, pero ¡ahora está tumbado en una cama con un ventilador asistido! ¿Te puedes imaginar lo descorazonador que debe ser para un hombre de éxito capaz como él? He querido preguntarte esto, Gu Longfan. ¿Qué he hecho yo para merecer tanta dureza y falta de bondad de vosotros? ¡Dime qué he hecho! Si hubiera sabido que iba a pasar esto, ¡habría preferido vivir mi vida en el exilio en vez de quedarme contigo en la familia Gu! —Ye Yuan le gritó a Gu Longfan en la calle, cerrando los puños mientras le miraba airada con sus ojos penetrantes. Al mismo tiempo, Gu Longfan vio el dolor y el odio en los ojos de la mujer por primera vez, sabiendo que esos sentimientos le debían de haber estado atormentando durante mucho tiempo. Por alguna razón, le pareció que Ye Yuan estaba lentamente perdiendo su encanto, aunque todavía estaba en los años dorados de su veintena. Pronto, los ojos del hombre se enrojecieron mientras doblaba su brazo y ponía las manos en los hombros de la mujer.
—Yuan, necesitas tranquilizarte. Como puedes ver, tu hermano no ha estado muy bien y por eso necesita que le salves. No vas a quedarte a un lado y mirar, ¿verdad? —Sintiéndose atacada en un punto blando, Ye Yuan de manera vindicativa estaba resentida contra Gu Longfan, que parecía ponerse altivo, como si estuviera controlándolo todo—: Yuan, se está haciendo tarde, así que sécate las lágrimas. Es hora de que lleguemos a la Oficina de Asuntos Civiles.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread