Capítulo 931 Nos quedamos en la misma habitación
—No podrás salir de Beijing, aunque me dejes a mí. Además, Shangguan Zhou tiene sus ojos puestos en ti. Eres muy inteligente, así que estoy seguro de que sabes lo que quiero decir.
Xia Micheng no le contestó. Tenía los ojos cerrados, como si estuviera dormida por completo. Su respuesta le hizo sentirse incómodo, porque su silencio, normalmente era indicio de la calma antes de la tormenta. Lu Yuzhen sintió que ella era como un puñado de arena fina al que intentaba aferrarse. Cuanto más intentaba aferrarse a ella, más rápido se le escurría. Lu Yuzhen alargó la mano para abrazarla. Este tiempo no había comido bien, por lo que había perdido mucho peso. Sin embargo, su cuerpo seguía siendo suave y fragante. Lu Yuzhen le besó la frente y le dijo:
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread