Capítulo 1884 La cicatriz en su rostro
Gu Longfan agachó la cabeza y besó a Ye Yuan. Esa vez, el beso fue suave y prolongado, por lo que ella abrió los ojos con sorpresa y pestañeó repetidas veces. Luego sintió que la lengua de él se escabullía dentro de su boca para jugar con la ciruela agria que estaba dentro. Después de lo que parecieron ser varios minutos, comenzó a sentirse mareada por la falta de aire, así que lo empujó. Él, tras separarse de los labios rojizos e hinchados de su esposa, le besó la cicatriz que tenía en el lado derecho del rostro. Más allá de toda su ternura y afecto, no había duda de la simpatía que ese gesto demostraba. «¿Mi cicatriz no le parece horrenda?», se preguntó Ye Yuan. A fin de cuentas, la vanidad era uno de sus atributos, y había momentos en los que ella se miraba al espejo y se estremecía ante la fea marca en su mejilla. Sin embargo, ahí estaba Gu Longfan, besándola con el mismo fervor que usaría en el resto de su piel intacta. Mientras ella se sumergía en la dulzura del beso, un calor le recorrió el cuerpo. Entonces, tomó una ciruela y se la metió en la boca a su marido.
—Concéntrese en sus documentos, presidente Gu —murmuró.
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