Capítulo 411 Ella se ha ido esta vez
Lu Yuzhen entró en el estudio y arrojó los documentos de la mesa al suelo con furia. Se quitó la corbata y la lanzó a la alfombra antes de tirarse él mismo en el sofá. Emanaba una clase inmensa de pesimismo agresivo cuando se echó en el sofá con pereza. Cerró sus ojos y los abrió de nuevo; aún estaban rojos. «¿Qué estaba haciendo ella ahora? ¿Estaría llorando? Soy tan imbécil, ¡un completo imbécil! Por favor, olvídame, Micheng».
Lu Yuzhen sintió que su salud mental no estaba bien. Sentía los síntomas de una recaída, y su pecho firme estaba alzándose hacia arriba y abajo de un modo espantoso, como una bestia. Su cuerpo no estaba bien y su mente estaba llena de imágenes de Xia Micheng con su camisón color champán. Él quería volver atrás, sujetarla a la cama y aplastarla para que se sintiera tan mal como él lo estaba ahora. La agitación lo había hecho bañarse en sudor. Estaba lleno de temor por su impulso de hacerle daño en el momento que él recaía. Justo cuando sintió que estaba fuera de control, se las arregló para ponerse de pie y abrir un cajón para coger sus pastillas de dormir. Abrió la tapa del bote y se tomó tres pastillas enseguida. «Después de tomarme estas pastillas, no tendré la urgencia de encontrarla. No la molestaré. Que así sea, déjala ir y déjala tener resentimiento».
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