Capítulo 289 Te quiero más que a nadie
Cuando dijo «la talla más grande», Xia Micheng se ruborizó intensamente; como hubiera deseado que hubiese un agujero donde meterse.
Sus ojos miraron de reojo al hombre. En ese momento, la espalda ancha de Lu Yuzhen estaba levemente visible ya que la puerta de la mampara de la ducha estaba medio abierta. El cuerpo de Lu Yuzhen podía hacer que la gente se enamorase de él perdidamente. Sus hombros anchos contrastaban con su cintura esbelta con sus anchos omóplatos, dándole el aspecto de un hombre de inmensa virilidad. La imagen ante ella era similar a la de un retrato de un hombre precioso dándose un baño.
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