Capítulo 1897 Estás a salvo
—Qué casualidad. Yo también quiero hacerte una broma, así que tampoco debes tomártelo en serio. —Xiao Cheng seguía sonriendo sin inmutarse.
«¿Xiao Cheng quiere bromear conmigo? ¿Qué clase de broma será?», se preguntó Xiao Si, que, de repente, tenía un mal presentimiento. Entonces, el otro movió los dedos, le retorció la muñeca y le provocó un dolor intenso. ¡Le había fracturado un hueso!
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread