Capítulo 548 Pagará por lo que ha hecho
Con un par de ojos hinchados, el rostro de Lourdes estaba cubierto de moretones, mientras que se veía la sangre chorreando por su boca. Por lo tanto, parecía que su estado encajaba con lo informado por el hombre: había intentado quitarse la vida mordiéndose la lengua. En ese momento, estaba amordazada con un paño para evitar que lo hiciera de nuevo. Miranda salió de su trance y respiró profundo. Luego, se acercó a ella y le quitó la mordaza de la boca. Después de eso, Lourdes tosió tan fuerte que sus lágrimas casi rodaron por su mejilla. Con los ojos enrojecidos, vio a Miranda de forma hostil, a diferencia de su habitual comportamiento amistoso. Sintiendo un escalofrío que la recorría, Miranda volvió a preguntar:
—Lourdes, ¿por qué tú?
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