Capítulo 100 El juego
«¿Qué hago? No puedo usar mis manos... ¿entonces cómo se supone que debo registrarlo? Si el collar está en su cuerpo, entonces tengo que desnudarlo, ¿verdad? ¿Cómo hago eso...?»
Miré fijo a Eduardo mientras se quedaba quieto mirándome con una sonrisa en la cara. «Cuando me quite estas esposas, ¡voy a golpearlo!»
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