Capítulo 30 Xing Yeshen

Chu Meng sintió una sensación de pinchazo detrás de sus ojos. Durante todo el camino, no había llorado a pesar de la situación a la que se estaba enfrentando. Sin embargo, en el momento en que escuchó las palabras de Situ Han, se aterrorizó y se sintió agraviada y comenzó a llorar. Situ Han finalmente vio lo pésima que estaba Chu Meng. Su abrigo estaba destrozado; se podían ver moratones por toda su cara y sus brazos. —¡Idiota! —La regañó una vez más antes de quitarse la chaqueta para abrigarla. Situ Han se la colocó sobre la cabeza mientras trataba de protegerla del fuerte aguacero; se inclinó y se la subió, diciéndole—: Ve a ayudar a Leng Xue.