Capítulo 424 Una trampa hermosa
Montar una gran formación solo no era una tarea fácil para Sebastian. Recordó que la mayoría de los maestros de formación tenían asistentes, al igual que la última vez cuando Isabella y Elvira trabajaron juntas.
"¡Dragón tonto, sal y ayúdame!" llamó Sebastian. En este momento, la única persona en la que podía confiar era Ellie. Ella era fuerte y tenía un formidable sentido divino, lo que la convertía en la asistente perfecta.
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