Capítulo 239 Asalto repentino
Sebastián no podía tener suficiente del Ballesta Desgarrador de Almas. Era tan impresionante que no podía esperar para entregárselo a María para que lo mejorara, esperando que pudiera hacerlo aún más letal. Si ella pudiera fabricar más de estos, sus futuros compañeros serían imparables. Solo imagina, una lluvia de flechas disparando desde la ballesta, todas impactando en el mismo objetivo, ¿qué caos causaría eso?
Estaba emocionado por las posibilidades, pero sabía que el arma no era fácil de hacer. El método para fabricarla se había perdido hace mucho tiempo, y entendía lo difícil que sería replicarlo.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread