Capítulo 128
De pronto escuché un zumbido en mi oído, todo estaba en absoluto silencio, sentía mis piernas y brazos entumidos, todo mi cuerpo estaba así. Me dolía. Y me había golpeado muy fuerte, era obvio. Luego varias voces lejanas alrededor se escuchaban hasta que abrí mis ojos de golpe y la luz me cegó.
ㅡ¡Anne, por Dios! ¿estás bien? ㅡCarolina estaba arrodillada junto a mí, su cara transmitía preocupación, así que lo que había pasado era grave.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread