Capítulo 93 Mu Chenjue borracho
Li Ye salió de la habitación para cenar y Li Xiao lo acompañó. Cuando se aseguró de que su hermano se había sentado a la mesa en el comedor, alegó que tenía que ir al baño a lavarse las manos para la cena y, en su lugar, se dirigió a la habitación del hermano. Abrió la puerta y entró en puntillas. Luego, tomó la bolsa de la computadora portátil y estuvo manipulándola durante un rato hasta que se dio cuenta de que era imposible abrirla sin una contraseña. El material de la bolsa era bastante especial. No era de tela, sino de un material muy resistente que no podía cortarse ni con tijeras. «Qué sospechoso. Me pregunto qué atrocidad estará haciendo que nadie lo puede ver». Li Xiao estaba tan molesta que le dieron ganas de estrellarlo contra el suelo.
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