Capítulo 120 Un furioso Hugo
Mientras tanto, en un apartamento desordenado con trozos de papel arrancados de un cuaderno esparcidos por el suelo, una mujer borracha estaba sentada en el sofá abrazando sus rodillas. Su cabello estaba despeinado y sus ojos estaban llenos de ira y descontento.
Era Camila. Gracias a Celia, todo su orgullo y autoestima habían sido destrozados. Incluso Tristán, su mentor durante cuatro años, la había abandonado. La había reprendido frente a una multitud. Nunca había sido sometida a tal humillación.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread