Capítulo 66 Bocadillo
"¡Ah, no lo habías mencionado! Pero esto es demasiado perfecto para ser verdad, así que quizá no me lo crea demasiado. Mi polla tampoco". Sí, mi puta mente me hablaba.
Antes de que pudiera negar o consentir, Verónica ya estaba arrodillada frente a mí, completamente desnuda, tomando mi polla entre sus manos. Y me entró un sudor frío cuando no dio ni una señal. Sus ojos se centraron en los míos mientras me la chupaba y me pregunté si debía mirarla fijamente o cerrarlos e imaginar que era otra persona.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread