Capítulo 20 ¿Te he hecho daño?
Y entonces me corrí. Sí, me corrí, después de más de veinte años de no haber sido tocada por un hombre, de haberme encerrado en mí misma, fingiendo que no era una mujer y que no necesitaba ser tocada, acariciada, mimada, penetrada, llenada.
No sé si fue porque hacía tanto tiempo que no lo sentía, o porque aquel príncipe estaba casi encantado... Pero podría definirlo como uno de los mejores orgasmos de mi vida.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread