Capítulo 83 Estruendo

Daniela terminó su jornada laboral del día. Había sido un día pesado y su jefe no le había puesto las cosas fáciles, pues había tenido que atender a una señora bastante grosera durante 4 horas seguidas; decía que su inglés no era bueno y exigía hablar con alguien que tuviera un nivel de inglés nativo. El Señor Reyes, su jefe, no tuvo más opción que estar supervisando la llamada todo el tiempo, para evitar que la señora pusiera una queja. Minerva, al observar que había sido un día duro para Daniela, le propuso salir a relajarse un rato.