Capítulo 239 El periódico

Unos días más tarde, Marco ya se había ido, siempre era el primero en salir. La prisa de su trabajo lo había llamado temprano. Sabía que tenía que estar de urgencia en la oficina, ya que había asuntos que atender, problemas que resolver, y aunque todo en él deseaba quedarse allí con Daniela y no separarse de ella en todo el día, sabía que tenía cosas preocupantes que resolver en la empresa. Las chicas, por su parte, ese día comenzaron a organizar la casa, desempacaron los recuerdos y los pequeños regalos que habían traído del centro histórico el fin de semana. Daniela sonrió al ver las pequeñas artesanías y recuerdos que sus amigas le habían comprado, y aunque sentía que el vacío de su partida no podía llenarse con objetos, esos pequeños detalles la hacían sentir que estaban más cerca.