Capítulo 464 - Desayuno familiar

Unos cuarenta y cinco minutos más tarde, Jackson y yo salimos del dormitorio con una niña pequeña, húmeda y feliz entre nosotros, una de sus manos en cada una de las nuestras. Ella avanza felizmente y ambos sonreímos hacia abajo, creo que ambos todavía estamos emocionados por la felicidad del baño. Decir que Marigold estaba feliz con el baño caliente es quedarse corto. De hecho, todo el baño era una maravilla para ella, desde la gran bañera de porcelana hasta el agua tibia que fluía y las burbujas y los juguetes. Seguro que no creo que vuelva a gruñirme cuando proponga la hora del baño nunca más.