Capítulo 394 - Preparación

Gimo, mis manos firmemente sujetas al poste de madera de la cama, mientras Pippa tira con fuerza de los cordones de mi corsé. -Pippa,- jadeo, tratando de mirarla por encima de mi hombro, -¿estás segura de que esto es necesario? Ya tengo una cintura bastante pequeña... -Lo siento mucho, Ariel,- dice Pippa, los cordones tan apretados en sus manos que sus dedos están enrojecidos y blancos. -Órdenes de Gabriel. Dijo que quiere que te veas a la moda y...- encoge los hombros, mirando hacia abajo mi elaborada prenda interior, insinuando que esto es realmente necesario.