—Muy bien, señor Hugo. Es hora de que me vaya. Adiós. He sido muy feliz trabajando con usted en el último mes. Espero que pueda encontrar pronto un excelente diseñador —dijo mientras extendía la palma de la mano para estrecharla.
Sus ojos se oscurecieron al mirar las hermosas manos de la mujer. Luego contestó mientras le tomaba la mano:
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread