Neera se apresuró a responder:
—Estoy bien. Ya no duele. De todos modos, me preparé mi propio ungüento. No se formarán cicatrices ni costras. La sangre se irá desvaneciendo gradualmente.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread