Capítulo 7 La mejor estrategia

Antonella salió de la casa poco después estaba en el club, al bajar del auto, otro vehículo se estacionaba cerca de ella y haciendo caso omiso entro, cuando estaba en la recepción sintió que alguien tocaba su hombro y se dio vuelta. —Hola Antonella, ya ni siquiera reconoces mi auto, será que podemos hablar, es más, te invito a desayunar y así nos ponemos al día de cómo van nuestras vidas, aunque estoy seguro de que en estos momentos la tuya no es muy divertida. —Hola Tom, está bien tú ganas, vamos a aprovechar que voy a desayunar y así me dices lo que tanto quieres expresar. Ambos caminaron hacia el restaurante del club, mientras los atendían, Tom no perdía la oportunidad de coquetearle a Antonella y expresarle sus sentimientos. —Y bien Tom, que es lo que quieres hablar. —Porque me tratas así, sabes lo mucho que me importas. Cuéntame cómo van las cosas en casa Lía me dijo que se iba a vivir con Steve y que la empresa está atravesando por una terrible situación. —Wow, desde cuando Lía y tú son tan cercanos, además si ya ella te contó para qué te voy a repetir lo que ya sabes. —Aunque no lo creas lamento mucho que la empresa esté atravesando un mal momento, quiero que sepas que si necesitas algo estoy a la orden; más de ser la chica que he amado tola vida eres mi amiga Antonella. —Gracias Tom, realmente estoy muy preocupada, llevo un par de propuestas, pero ya sabes cómo es Steve de terco y testarudo. —Si es tan testarudo y arrogante que hasta le cuesta reconocer que está locamente enamorado de ti, aunque sinceramente los dos son iguales. —Gracias, amigo Tom, por compararme con ese chiquillo tonto. —Antonella, estoy enamorado de ti, pero tengo los pies en la tierra y no voy a vendarme los ojos para no ver lo que siente por él, mejor terminemos el desayuno, yo también debo volver a la empresa. Antonella y Tom se despidieron y ella se fue directo a la empresa, al llegar no vaciló en ir a reunirse con Steve y Jordán. —Buen día se me hizo un poco tarde, es que en el club me encontré con unos amigos y me invitaron a desayunar, pero ya estoy aquí, estas son los informes y sus respectivas propuestas. —Unos amigos o el imbécil de Tom, porque el único con el que siempre estabas era con él, acaso volviste a confiar después de lo que invento sobre ti Antonella. —Si Steve estaba desayunando con Tom lo encontré por casualidad en el club, además a ti qué diablos te importa, deja de meterte en mi vida y ocúpate de tu prometida; ahora si me permites voy a explicar en que consiste mi primera propuesta. La propuesta que tienen en sus manos consiste en un plan de integración donde participaran los departamentos con problema de comunicación, allí se incluirán gerentes, supervisores y empleados. Además de nosotros tres contaremos con especialistas en el área que a través de charlas, dinámicas y otras técnicas trataran de solucionar el problema, esta estrategia tendrá una duración de tres meses, se tomaran los días viernes, sábado y domingo para el retiro. —Me parece maravilloso, Antonella, creo que con esta estrategia podemos solucionar el problema con el personal, pero antes de decidir ¿cuál es la segunda estrategia?. — Dijo Jordán. —Bueno Jordán, más que una estrategia es una decisión, la cual sería hacer un recorte de personal en el cual se tomaría parte de estos trabajadores conflictivos. —Antonella no me gustaría tener que usar esa estrategia, preferiría dejarla como última opción si la primera no funciona, ahora bien cuál es la tercera opción supongo que te falto la carpeta de esa propuesta. —La tercera propuesta Steve sería vender algunas acciones, así tendríamos un socio que aporte capital. —Acaso perdiste la razón, no venderé ni dejaré que tú vendas parte de la empresa de mi padre, ¡A claro ya entiendo!, ahora me queda claro lo que hacías con Tom en el club, corriste a los brazos del mejor postor para darle en bandeja de plata la empresa a nuestro principal rival. Antonella estaba cambiando de color, no podía creer que Steve fuera tan bruto, ya estaba harta de tantos insultos, así que no aguanto y le dio una bofetada. —Estoy harta de que sigas insinuando que soy una cualquiera, para tu información quien le dijo a Tom sobre la situación de la empresa y que tu futura esposa estaba en la casa fue ella, así que si buscas una traidora, pues, déjame decirte que todas las noches te revuelcas con ella en tu propia cama. Y si no te voy a negar que Tom me ofreciera ayuda económica y no la acepte, pero te diré algo, ya que contigo no se puede dialogar y todas las palabras hacia mí son insultos, te advierto que si las estrategias anteriores no funcionan, pues aceptaré la oferta de Tom cueste lo que cueste, que tengan buenas tardes. —Qué rayos pasa contigo Steve, ya deja de empeorar las cosas, si tanto la amas y no quieres perderla, ya deja de complicar las cosas y resuélvelo, las vidas de muchas personas dependen de esta empresa, así que deja de comportarte como un adolescente. Los días pasaban Steve y Antonella trabajaban fuerte, finalmente se había decidido por la primera opción así que todos los fines de semana se iban a la granja que su padre los había llevado cuando estaban pequeños, allí sería el retiro con los trabajadores. Entre pláticas, dinámicas y juegos el clima iba mejorando, por su parte Jordán servía de cupido, así que había arreglado con los instructores que Steve y Antonella quedaran en el mismo equipo. A pesar de sus diferencias, ambos sabían que era vital mantener el negocio a flote si querían conservar la fortuna de la familia. El retiro estaba dando frutos, sin embargo, cuando regresaba a casa el convivir con Lía era como ser torturada —Ok ya nos quedan dos fines de semana y la actividad de hoy será a campo abierto, los grupos deberán unirse para sobrevivir un día y medio en la naturaleza, solo llevarán un kit pequeño para que se ayuden, cada uno deberá tomar uno, allí está un mapa, una navaja, vendas una olla y un cubierto así que suerte. —Dijo la facilitadora. Mientras tanto Lía preparaba todo para la boda, Steve no había tenido tiempo de librarse de ese compromiso. El fin de semana había terminado, era momento de volver a casa, indiscutiblemente la relación entre Steve y Antonella había mejorado, en la semana se quedaban trabajando hasta tarde, ambos día tras día descubrían habilidades y rasgos que no conocían el uno del otro. Antonella se sorprendía de la capacidad que tenía Steve para tomar decisiones difíciles y resolver problemas complicados, lo pudo apreciar cuando encontraron la fuga de dinero y despidió a todos los involucrados, mientras que Steve observaba que Antonella era una negociadora habilidosa y con una inteligencia emocional excepcional. Las constantes disputas se transformaron en discusiones más productivas, y poco a poco comenzaron hacer más cercanos; Lía no estaba feliz por este cambio entre Steve y Antonella, no podía permitir que la tonta hermanastra arruinaran sus planes de quedarse con la gran fortuna que poseía Steve. —Buenas noches, joven, vine a preguntar si necesita algo más, ya voy a retirarme a mi habitación. —No Alfred, gracias puedes retirarte yo dentro de poco haré lo mismo estaba revisando unos informes que Antonella me pidió leer. —Veo que las cosas entre ustedes han cambiado mucho. —Si amigo Alfred Antonella es única, es inteligente, bella, divertida; sabes luego que regrese del retiro hablaré con Lía, no puedo seguir con esta estúpida falsa de matrimonio para que mentir si es Antonella la mujer que amo. —Me parece grandioso, joven. Lamentablemente, Lía estaba detrás de la puerta escuchando la conversación y tenía otro plan preparado. —Buen día, grupo feliz viernes, la semana pasada realizamos una actividad para determinar su capacidad actual para trabajar en grupo, la cual fue maravillosa porque logramos ver la integración y el trabajo en equipo. Hoy ya que es nuestro último día los llevaremos a un lugar diferente, es una parte del bosque el cual tiene una casa, refugio con comida y todas las comodidades donde pasaremos la noche. El desafío es dejarlos en parejas a cierta distancia con el mapa, la brújula y por supuesto con el kit, ustedes deberán unirse para encontrar el camino a la casa refugio y así pasar una noche confortable.