Capítulo 125 Dispuesto a matar
Katya estaba durmiendo en la camilla de su habitación, Egan la había estado observando por horas. La pequeña niña recién nacida estaba en una incubadora junto a la cama de Katya, dormida, con los puños apretados y sus extremidades abiertas. Una enfermera constantemente venía a chequearla y tomarle sus signos. Sylvana y Argus estaban en la cafetería.
Egan tenía todo controlado, estaba en paz y feliz porque al final todo había salido bien.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread