Capítulo 98 Voy para allá
Katya no sabía si gritar, llorar, romper algo o abrazar a alguien. Probablemente quería hacer todo al mismo tiempo. Pero, aunque este bebé era una buena noticia para ella, donde su corazón agitado lanzaba fuegos artificiales y su mirada irradiaba más que el sol. Solo sabía que también significaban más problemas. Si las cosas eran difíciles solo ambos, con un bebé de por medio Egan sufriría un colapso total.
Y Katya no sabía como sobrellevar eso.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread