Capítulo 170 Por fin voy a volver
Andrea se despertó dos horas después. Abrió los ojos y miró al techo, dándose cuenta de que todo lo que vivió en su mente no era un sueño. Estaba en la villa de Jocsán. Pero no la tocó. La Señora Hinojosa subió en persona la comida, la colocó en la mesita y dijo:
—Señorita Guadarrama, el señor ya se fue, son casi las once, debería comer algo. —Andrea estaba a punto de levantarse, y la fina manta se deslizó de su cuerpo mientras se movía… No tenía nada puesto… Tenía moretones en el cuello y la clavícula, y también en los brazos. La señora se sonrojó—. Debería vestirse primero, yo me iré ahora.
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