Capítulo 38 Propuesta indecente
Leah se sorprendió cuando el Sr. Guardaespaldas la besó en la cocina. Su corazón latía con fuerza al pensar en lo que podría suceder si alguien los sorprendía. ¡Dios! Estarían en un gran problema esta vez si no lo hubieran estado después del incidente de la tarde.
Pero mientras sus labios reclamaban los suyos, era como si el resto del mundo se desvaneciera. Él la besó con fuerza y profundidad, vertiendo cada onza de su emoción en el beso: su deseo, su anhelo, su necesidad de besarla, de tocarla. Leah se sentía perdida en él como si no fuera un ser separado sino parte de él, o tal vez él era parte de ella. La idea de separarse de él parecía imposible, irreal.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread