Capítulo 68 Lonchera hecha con amor
Frunció el ceño, mostrando un atisbo de decepción en su rostro. "¿No vas a comer un poco? ¡Solías amar los platos que preparaba!"
"No tengo hambre, pero los perros callejeros que merodean por la entrada del hospital parecen estarlo, rebuscando en los cubos de basura. Puedes dárselo a ellos", dijo Raylee, su voz goteando sarcasmo.
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