Capítulo 4 De vuelta a casa

Después de comer, ayudamos a recoger la mesa, nos fuimos Cati y yo a nuestros dormitorios para ponernos el bikini, una vez que ya lo teníamos puestos y cogiendo las toallas, nos marchamos de casa hacia la playa donde ya la esperaba los dos chicos que conocimos el primer día que fuimos a bañarnos — Hola Tom ¿hace mucho que nos esperáis? — preguntó mi amiga — A ti una eternidad preciosa – contestó él abrazando a mi amiga, besándose los dos en los labios — Que pegajosos, hola me llamo Aron,--- me dijo el otro chico — Yo me llamo Alice y si tienes razon son unos pegajosos — dije pegando mi amiga en el hombro con su mano Pusimos los cuatro las toallas en la arena, metiéndonos enseguida en el mar jugando con el agua, pero sin esperarmelo Aron, me cogió por las rodillas colgandome en su hombro como si fuera un saco tirándome al agua, estuvimos jugando en el agua bastante tiempo, hasta que una vez cansados salimos tumbandonos en las toallas. — Hola me llamo Kevin, soy un amigo de las chicas — dijo sentándose a un lado en mi toalla — Tio no eres un poco mayor para ser amigo de estas dos preciosidades — dijo Aron haciéndomenos reir a mi amiga y a mi — Y tú no eres demasiado idiota para tirar a una chica como has tirado a Alice, se podía haber echo daño — contestó Kevin muy serio Me tumbe en la toalla sin querer saber nada de la discusión que tenía Aron y Kevin, pero unos minutos después y cansada de tanta estupidez, me levanté de la toalla volviendo a mi casa, entre quedándose mi nona un poco extrañada de verme sola, entre en mi dormitorio, me fui al baño y me quite el bikini y me duche, cuando terminé cogi la toalla rodeando mi cuerpo con ella, cogi unas bragas del cajón y una camisa ancha del armario para vestirme saliendo hacia la terraza donde se encontraba mi nona. — ¿Qué ha pasado? y Cati ¿se ha quedado en la playa con Kevin? — preguntó — Si está con él y con los dos chicos que conocimos cuando vinimos — Alice cariño si quieres, contestame ¿Es Kevin el padre de tu bebé? cuando lo miro y veo que te está mirando, me da la sensación que aunque intente ser frío, creo que te ama ese muchacho — Nona, no digas que ves lo que no se puede ver, y Kevin no es un muchacho con treinta dos años — Es guapo, es un CEO como tu padre, tiene buen cuerpo, no me dirás que no te has fijado en los encantos que tiene, porque yo aunque sea vieja, si me he dado cuenta — También es el novio de la hermana de mi mejor amiga, y es un fruto prohibido para mi — contesté — Bueno, pero eso no es impedimento, las parejas se juntan o se separan o después se juntan con otras parejas — me dijo Después de estar dos semanas tomando lo que el médico me receto, las náuseas y los vómitos fueron remitiendo pudiendo empezar a comer algo más y mejor. aunque tenía un problema mucho más mayor y ese era Kevin que cuando quería entraba por las noches en mi dormitorio y me hacía el amor, hasta altas horas de la noche sin que yo pudiera impedirlo, ya que cuando me despertaba e intentaba apartarlo, apretaba su boca con la mía para que no gritara, me arrancaba las bragas y cuando me penetraba, cogia mis brazos con una mano poniéndolos por encima de mi cabeza mientras con su otra mano, la introducía entre su cuerpo y el mío acariciando mi clítoris moviéndose cada vez más y más deprisa, dándome unos orgasmos increíbles, mientras sentía como su miembro palpitaba dentro de mi. Una mañana, estábamos Kevin, Cati y yo en la cocina desayunando, cuando empezó a sonar el teléfono de Kevin, lo cogió, miró quien lo llamaba, conestando enseguida con el semblante muy serio se levantó de la silla y se fue a la terraza para hablar, volviendo a la cocina ,muy serio poco después — Mocosas recoger vuestro equipaje, tenemos que volver a Kansas, ha surgido un problema — dijo Kevin — ¿Qué ha pasado, cielo? no lo puede resolver, el señor Anderson? — preguntó nona —Me temo que no,por eso me han llamado para que vuelva a Kansas hoy mismo — contestó él Cati, sin terminar de desayunar, se levantó muy enfadada de la mesa saliendo a la terraza, sentándose en una de las hamacas que había, termine de tomarme el zumo que tenía en el vaso y dirigiéndome a la terraza, me senté al lado de ella abrazándola — No hay derecho, ¿ahora que le digo a Tom? — preguntó — Podéis llamaros o enviaros mensajes, si tenemos que volver a casa, seguro que es por algo importante — Se que tienes razón Alice, pero estaba ilusionada con verle esta noche — me dijo — Venga levanta que tenemos que hacer el equipaje y de paso mandale un mensaje, estoy segura de que Tom lo comprenderá — le dije cogiéndole el brazo para levantarla de la hamaca Entramos las dos marchándonos a nuestros respectivos dormitorios para hacer nuestro equipaje, casi terminando el mio escuche como entraban en mi dormitorio, me gire viendo a Kevin acercarse a mí. Puso sus brazos en mis hombros oliendo mi cabello, lo retiro besándome el cuello haciendo que mi piel se eriza, — Cuando volvamos a Kansas, quiero verte en privado, voy a alquilarte un piso y estarás allí cada vez que yo necesite verte y ¿entendido? — me dijo — No Kevin se acabó, esto no puede seguir así, olvídame y además no pienso volver a la empresa, no me verás más — conteste De pronto me giro poniéndome enfrente de él, mirándome con rabia. — Harás lo que yo te diga o lo pagarás muy caro, tu eres solamente mía y además eres mi esposa, me perteneces Alice, todo de ti es mio Puso su mano en mi nuca, apretando sus labios con los míos tumbandonos en la cama, me subió el jersey y el sujetador dejando mis pechos desnudos, me mordió dejando la marca de sus dientes mientras una de sus manos me tapaba la boca para que no gritara, lamió y mordió mis pezones, hasta que una descarga me hizo tener un orgasmo, levantándose Kevin de la cama mirándome. — Cada vez que te veas desnuda en el espejo, recuerda quien te hizo esas marcas, tu marido quieras o no, y sabes muy bien que yo soy tu dueño — me dijo — Las marcas que me haces se van, como te vas a ir tu de mi vida— contesté aún tumbada — Eso lo puedo arreglar, te voy a marcar a fuego como mía — contestó poniendo sus brazos a cada lado de mi cuerpo acercando su boca a mi boca Kevin se marchó del dormitorio sin decirme nada más, me arregle la ropa y termine de hacer el equipaje, cuando fui a la entrada de la casa, ya estaban esperándome en la puerta Kevin, Cati y mi nona. Nos abrazamos mi nona y yo mientras el chofer, metió en el maletero del coche, nuestro equipaje. — Llámame pronto y dime cómo estáis mi nieto y tú, y recuerda lo que hablamos, Kevin se hará el duro contigo, pero sus ojos no mienten, él te ama aunque te lo niegue. — me dijo Cuando llegamos a Kansas, con nuestro equipaje nos dirigimos hacia el aparcamiento donde ya nos esperaba el chofer con las puertas de la limusina abiertas dejando nuestros equipajes en el maletero, subimos al vehículo arrancando enseguida el chofer el vehículo. La primera parada fue en la casa de Cati, dándole Kevin la orden al chofer que la siguiente parada fuera en su casa,, bajamos de la limusina con mi equipaje y el suyo marchándose el conductor con la limusina. Subimos al coche de Kevin aparcando en un parador solitario a las afueras de la ciudad, baje del vehículo extrañada, me senté en un muro que había donde se podía ver un precioso paisaje bloqueando Kevin entre el muro y su cuerpo. — Déjame tranquila, o quieres que le diga a tu novia —- no pude seguir, con la mano cogió mis pómulos con fuerza acercando su boca a la mía — Soy el padre de tu hijo y no dirás nada, ya te dije que tengas la boca cerrada, serás mía siempre que yo quiera, eres mi esposa y yo tu dueño — me dijo, apretando después su boca con la mía mientras me besaba Puse mis manos en su pecho y dándole un fuerte empujón lo aparte de mí, subiendo a su coche muy enfadada, sentándose Kevin en el asiento del conductor — Será mejor que me lleves a mi casa, si no quieres que Dory sospeche de nosotros — le dije Kevin aparco el vehículo una calle más abajo de mi casa, fui a bajar del coche, pero puso su mano en mi nuca con fuerza acercando mi boca a la suya, apretó sus labios con los míos, metiendo su mano por debajo de mi falda, haciendo círculos en mi clítoris, intente apartarlo, pero estaba dándome tanto placer que lo deje, separando su boca de la mía cuando empezó a notar que yo me movía, sintiendo escalofríos poco antes de tener mi orgasmo apartando él sus dedos . — Cuando nos veamos otra vez, te daré el orgasmo que ahora deseabas, así me suplicaras que te de otro más, bájate ya de mi coche — me dijo dejándome sin saber qué decirle Baje de su coche muy enfadada, cogi mi equipaje y dando un portazo a la puerta me aleje del vehículo acercándome a la casa de mis padres, nada más entrar por la puerta Lucía nuestra ama de llaves me abrazo y cogio mi equipaje muy contenta —Alice mi niña, ya estas en casa, tu madre está en el jardín se alegrará mucho de verte otra vez en casa — me dijo — Yo también me alegro de volver a casa, voy a ver a mi madre – le dije Me fui al jardín viendo a mi madre sentada en uno de los sillones con su vaso de bebida refrescante de té en la mano. — Mama ya he vuelto — le dije sorprendiendola, levantándose del sillón para abrazarme — Que alegría mi amor que ya estés en casa, pero siéntate cielo, quiero que me lo cuentes todo ¿y Cati? ¿no ha venido contigo? — preguntó Estuvimos en el jardín hasta que le conté casi todo, eludiendo partes de las que yo no me sentía orgullosa. Más tarde llegó mi padre reuniéndose con nosotras, preguntandome lo mismo que mi madre. — Dory esperaba a Kevin en mi oficina, si no les digo que se vayan a casa, hubieran sido capaces de hacerse el amor delante de mi — nos dijo mi padre, haciéndome daño sus palabras sin saber mi padre el porqué Al día siguiente no fui a la empresa ya que estaba muy cansada y no me encontraba muy bien, me quedé hasta el mediodía en la cama hasta que mi madre me llamó para que me aseara y fuera al jardín donde íbamos a comer porque teníamos invitados. Me levanté de la cama sin ganas, entre en el cuarto de baño para ducharme, una vez que termine cogí la toalla que había colgada en la puerta saliendo del cuarto de baño con ella alrededor de mi cuerpo para irme a mi dormitorio, pero antes de entrar escuche a Dory y a Kevin hablando con mi madre. Entre en mi dormitorio para vestirme, cogi del armario mi ropa íntima y un vestido ya que hacia calor, me puse las bragas de espaldas a la puerta, cuando me iba a poner el vestido, sentí una mano acariciándome un pecho, me gire rápidamente poniendo Kevin su mano en mi nuca y sus labios pegados a los míos. Le di un fuerte empujón apartándolo de mí. — ¿Que te crees que estás haciendo, esta tu novia ahí fuera, déjame en paz Kevin ya te lo dije ayer olvídame — le dije enfurecida — Tranquila que no es bueno para mi hijo que te pongas nerviosa, además le he dicho que voy al baño — Marchate de mi dormitorio por favor — Eres preciosa Alice, — me dijo acercándose a mí obligándome a retroceder — Kevin porfavor, pidamos el divorcio y olvidate de mí — le dije mientras retrocedía — Nunca Alice, tienes a mi hijo en tu vientre y hasta que lo tenga en mis brazos será mía cuando, donde y como quiera yo — me dijo hasta que escuchamos la voz de Dory llamando a Kevin, marchándose él de mi dormitorio Aunque no me puse el despertador porque no pensaba volver a la empresa de mi padre a trabajar, me empezó a llamar a mi madre consiguiendo que me despertara, me levanté de la cama acercándome a la cocina para buscar a mi padre y hablar con él, pero antes de que pudiera decir nada, le vi el semblante muy serio y pensé que sería mejor ir con él y ya en su oficina decírselo. Entre en el cuarto de baño, me quite la ropa metiéndome en la ducha, sali y ccogi mi alabornoz que colgaba en la puerta — Alice date prisa, que hoy tengo mucho trabajo y no quiero llegar tarde — me dijo mi padre Entre en mi dormitorio para vestirme, sali diez minutos después y sin poder tomarme un café, cogi mi bolso saliendo de mi casa junto a mi padre. El chofer ya nos esperaba con la puerta abierta de la limusina, la cerro poniéndose en el asiento del conductor marchándonos de casa. Paro en la misma puerta del edificio donde tenían Kevin y mi padre la empresa, bajamos del vehículo cuando el chofer nos abrió la puerta entrando en el edificio seguidamente — Buenos días señor Anderson — Saludo la recepcionista Mi padre también la saludo dirigiéndonos los dos hacia los ascensores, subimos a uno de los dos que habían bajado mi padre en la planta donde tenía su despacho — No podré esperarte a la hora de comer, coge un taxi para ir a casa porque hoy necesito yo la limusina — me dijo mi padre Cuando mi padre bajó del ascensor, apreté el botón de la planta donde estaba el bar, ya que no pude desayunar en mi casa y necesitaba tomar algo antes de enfrentarme a mi dominante jefe que era Kevin. Me puse en la cola que había hasta que tocó mi turno viendo a Bryan mirándome con su sonrisa preciosa — Te he echado de menos preciosa, has estado de vacaciones según me dijo la asistente de Kevin el gruñón — me dijo haciéndome reir — Sí, estaba muy estresada y mis padres me mandaron a la casa que tenemos en la playa — le dije — ¿Quieres un café? Te invito yo, esta tarde te puedo recoger en tu casa ¿te parece bien a las ocho? – — Creo que no va a poder ser, a esa hora estará repasando informes atrasados, Alice sube a la oficina ahora te llevaré un zumo, sabes que el café para lo que tienes no es bueno — dijo Kevin dejando a Bryan extrañado — Me parece bien a las ocho, te esperare — le dije mirando a Kevin Me fui hacia los ascensores, subí a uno de ellos tocando el botón de la planta a donde iba, al llegar salí de él, saludé a Sara sentándome en mi mesa, llegando Kevin minutos después. — Alice a mi despacho, ya — me grito — Chica que mal lleva el jefe que hoy tenga más de una reunión — me dijo Sara — No habrá echo los deberes a tiempo — contesté riéndonos las dos Cogi de mi mesa la libreta y un lápiz entrando en el despacho de Kevin que estaba sentado en su sillón detrás de su mesa, mirándome con el semblante muy serio — Siéntate y explícame porque flirteas con el niñato del bar delante de su jefe y de tu marido, estas casada conmigo Alice, entérate de una vez — Perdona ¿qué? ¿Y tú? cual es tu responsabilidad conmigo — le dije viendo como se levantaba de su sillón acercándose a donde yo estaba sentada — Voy a hablar con tu padre y estoy seguro que te echara de casa, a partir de ahí, tú no podrás coquetear con nadie, mi responsabilidad es mi hijo y no voy a dejar que un niñato de tres al cuarto le haga daño, ¿entendido? — me dijo acercando su boca a la mía — Me da lo mismo lo que me digas, tu estás con Dory, ¿Quieres que hable yo con ella? que le diga quién es el padre de mi hijo — le pregunté — Dory ya sabe que estás embarazada de mí, hable con ella cuando vinimos de Miami y le dije que eres un vientre de alquiler inseminada con mi semen — me dijo dejándome estupefacta — ¿Qué has hecho, que? — pregunté — Sois muy amigas y ella estaba preocupada por no darme descendencia, así que hable con ella y le pareció perfecto, me queda hablar con tu padre y que te vayas al piso que he alquilado para nosotros o si prefieres te puedes venir a vivir conmigo y con Dory, así te tendré vigilada todo el día — Estás loco Kevin ¿lo sabías? — le grité — Loco por ti, loco por follarte, loco por ver a mi hijo nacer, si Alice estoy loco — contestó cogiendome de los brazos para levantarme del asiento Una vez que estaba de pie, intenté marcharme pero antes de llegar a la puerta, Kevin se adelantó cerrándola con llave, se fue acercando a mi mientras yo retrocedía tropezandome con su mesa. Pegó su cuerpo al mío mientras su mano acariciaba mi entrepierna y sus labios besaban los míos. — Te debo dos orgasmos ¿recuerdas? — me dijo mientras apartaba todo lo que había encima de su mesa, tumbadome boca arriba, Introdujo sus manos por debajo de mi vestido, me quito el tanga guardandoselo en el bolsillo de su pantalón, me puso las piernas encima de sus hombros poniendose él de rodillas en el suelo delante de mi, puso su boca en mi sexo lamiendo con la lengua mi clitoris, haciendome gemir de placer, mientras arqueaba mi espalda, puse mis manos en su cabeza apretando hacia a mi para que siguiera, cuando introdujo dos dedos dentro de mi, teniendo que taparme la boca con la mano al sentir una fuerte descarga terminando en un cruel pero maravilloso orgasmo, poniendose Kevin de pie despues de darme mi orgasmo, se desabrocho el cinturon y la cremallera de su pantalón, introduciendo su miembro dentro de mi enseguida — El primer orgasmo cumplido, ahora cariño te dare tu segundo orgasmo, — me susurro al oído Por cada embestida suya, yo no sabría donde cogerme de tan fuerte que era, apretó su boca con la mía callando mis gemidos y los suyos, siguió embistiendo cada vez más deprisa mientras lo miraba cerrar los ojos y resoplar cada vez más, hasta que un beso muy apasionado nos ocultó los gemidos de nuestros orgasmos, poniendo su cabeza en mi pecho, notando en mi vientre los rápidos latidos de su corazón — contigo es como tocar el cielo Alice, me tienes loco — me dijo jadeando . .. . ..