Capítulo 1063 Yo nunca miento
De repente, un auto pasó a toda velocidad junto a Tawan, evitando por poco embestirle. Con sus rápidos reflejos, pudo impulsarse con una mano, deslizándose por el capó del auto. Cuando llegó al otro lado, la furgoneta plateada ya se había incorporado al tráfico. Sería imposible alcanzarla con sus propias piernas. Miró de forma frenética a su alrededor antes de divisar un taxi. Se apresuró a llamarlo, se deslizó dentro y señaló la furgoneta.
—¡Siga a esa furgoneta plateada! —El taxista se giró para mirarle. Como era obvio, se mostró reacio a ayudar cuando se dio cuenta de que Tawan era extranjero.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread