Capítulo 122 La aceptación de isis
Pero Isis negó rápidamente; no quería enfrentar esa memoria. Le aterrorizaba ver a ese terrible lobo de ojos rojos arrastrándola por un pie, era tan vívida que sentía el dolor de su mordida. Sabía que un día debía hacerlo, quizás en otra ocasión.
— ¡Hoy no! Prefiero quedarme aquí contigo —dijo acercándose y volviendo a abrazarlo como si fuera Mat. Se sentía muy feliz, aunque también estaba cansada; los ojos se le cerraban—. ¿Puedes quedarte a dormir conmigo hoy, por favor?
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread