Capítulo 538 Por favor, mantén la calma
Respecto al desafortunado accidente de auto, Leonardo poseía en realidad un conocimiento mínimo. En consecuencia, cuando se vio sometido a un intenso interrogatorio destinado a preservar su seguridad, se vio obligado a ofrecer sólo las respuestas más sinceras y veraces que pudo reunir.
—Señor Madrazo, ¿podría… considerar la posibilidad de apartar primero la daga? —La voz de Leonardo tembló de forma notable, teñida de un miedo palpable. Era una verdad universal que el miedo a la muerte perseguía a todo el mundo, ¿no?
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread