Capítulo 46 46 Humanos

La Suprema Buenisidad conocido por los pobladores como el curandero del poblado, miró a los aldeanos con preocupación. Sabía que algo grave estaba sucediendo y que debían actuar con rapidez se acercó para escuchar atentamente lo que los aldeanos tenían que decir. —Sí, nos referimos a los humanos —respondió uno de los aldeanos—. Algunos de nuestros vecinos han desaparecido sin dejar rastro. No sabemos qué está pasando, pero estamos muy preocupados.