Capítulo 5 Las princesas de aratía

El rey Aratiel Fuenmayor observaba feliz a sus dos princesas, el reino estaba lleno de felicidad por haber recuperado a las dos. Sobre todo se sentía complacido de que la mayor, Lilyana Arabel que era su nombre real, seguía siendo una princesa hada excepcionalmente juiciosa y seria. Desde una edad temprana, demostró una madurez y un sentido de responsabilidad que la distinguían entre sus compañeros. Siempre se tomaba muy en serio su papel como futura líder de Aratía y se esforzaba por mantener la armonía y la prosperidad en su reino. Por eso fue que pudo lanzar el tan poderoso conjuro mágico que convirtió a su hermanita en humana, salvándola de los depredadores. —Querido —le llama la atención la reina hada Lisbel—, ¿te has preguntado por qué la Suprema Buenicidad no nos devolvió a Shairy en cuanto la encontró?