Capítulo 45 Los románticos tienen una vida corta y la sabiduría lastimará al espectador

Al fin, Bai Yunjin se dio cuenta de lo que ocurría cuando se estaba cambiando los zapatos. Por lo general, habría muchas sirvientas realizando tareas en la cocina, el pasillo, el lavadero y demás. Sin embargo, era raro que la casa estuviera vacía y sin vida. Se puso sus pantuflas de peluche rosas y se quedó helada en la puerta. «¿Dónde están todos?» Mientras pensaba en ello, se oyó el pitido de alguien tecleando el código de acceso y, con un clic, la puerta se abrió por un pequeño margen. A continuación, una mujer de cabello corto hizo un inmenso esfuerzo por meter una bolsa de equipaje por el hueco de la puerta. Llevaba un atuendo deportivo rosa descolorido. En cuanto vio a Bai Yunjin, se quedó paralizada.