Capítulo 7 "¿Thomas?"

Carol Miércoles, 9 de septiembre del 2015.  Alex y yo llegamos a casa a las cinco de la tarde. Tendría que buscar una alternativa a esto de ir y venir en su auto, hoy tuve que esperar una hora a que terminara lo que sea que estuviera haciendo para podernos ir. Entramos a la casa y cada uno fue a su habitación sin decirnos ni una sola palabra, ni en el camino hacia la escuela, ni cuando veníamos, nada. Si no lo hubiese conocido antes y escuchado hablar diría que era mudo. Así de linda era nuestra relación de "hermanos". El tipo era un idiota total, pero tendría que hacer un esfuerzo e intentar entablar lo más básico y parecido a una amistad por el bien de la relación de mi madre con David. Saqué mi tarea de la mochila y noté que mi teléfono seguía aún ahí dentro, apagado. No me gustaba que me interrumpieran mientras estaba en clases, además, tampoco quería que los profesores me regañaran en mi primera semana de escuela y ser la chica nueva. Con el lío de las clases, las prácticas con las animadoras, el almuerzo y luego las dos clases de la tarde lo había olvidado completamente. Lo encendí y comenzaron a llover las notificaciones y los mensajes, tenía uno de mi madre y uno de David, preguntándome ambos como me estaba sintiendo en mi camino por Victory, les respondí con un "¡Bien!", y pasé a revisar las notificaciones. Quité los zapatos de mis adoloridos pies, hoy el ensayo con las animadoras fue bastante intenso, al parecer Sahara quería demostrar algo, para lo que me importa. Me acosté en mi cama y comencé a revisar mis redes sociales. Tal y como había dicho Betty, mi nombre y el de otras tres personas que se incorporaron nuevas como yo al último año, estaba en WhatsApp y Twitter con un mensaje de bienvenida y buena suerte. Debajo de la foto que nos había hecho esta mañana un chico del cuerpo estudiantil a los cuatro juntos, había varios comentarios, todos positivos al parecer. Mientras veía los revisaba por curiosidad llegó un mensaje de mi madre: Mamá: Carol, David y yo llegaremos tarde a casa. Por favor prepara la cena para ti y Alex. Besos. El efecto secundario de tener una madre enfermera que hacía turnos dobles en el hospital, era que tenías que aprender a cocinar si no querías gastar todo el dinero pidiendo pizza y comida china. Terminando de responderle con un "Está bien" llegó otro mensaje, esta vez de un número desconocido. Su foto de perfil era la de un chico con un cuerpo bastante musculoso de espaldas a la cámara y una puesta de sol delante de él, así que no podía saber de quién se trataba. Número desconocido: Hola Carolina, vi en las páginas de Victory High School que entraste nueva a la escuela. Bienvenida. Me resultó raro que alguien escribiera a mi número privado, casi todos los estudiantes me habían dado la bienvenida en los comentarios de las fotografías que habían publicado. Carol: Gracias. Perdona que pregunte, pero... ¿eres miembro del cuerpo estudiantil? «Tal vez era uno de ellos dándome la bienvenida personalmente.» Número desconocido: ¿Por qué preguntas tan específicamente? Carol: Es que nadie que no conozca me había escrito a mi número personal, lo siento. Número desconocido: Tranquila, entiendo. Soy un estudiante normal como cualquier otro. Vi tu número en WhatsApp y decidí escribirte. :) Número desconocido: Solo quería darte la bienvenida a la escuela y a la familia. Sé que es difícil ser el nuevo y no conocer a nadie. Número desconocido: También quería decirte que eres muy hermosa. Te busqué en Instagram y no pude evitar ser uno de tus seguidores, tus fotos captaron mi total atención. ;)  «Mieeerda, no puedo creer que ya tenga un acosador y hace solo cuatro días que estaba viviendo en Chicago. Espera, ¿dijo familia?» Carol: Gracias por el cumplido, eres muy amable. ¿Cómo te llamas y porque dijiste "bienvenida a la familia"? Número desconocido: Me llamo Thomas, soy un primo de Alex. Sé que no sabrás quién soy porque hace muchos años tuvimos que mudarnos mis padres y yo por problemas en la familia que tuvo mi padre, pero me enteré de la nueva relación de David. «Wow, ¿un primo de Alex? Pero si David tenía un solo sobrino.» Carol: Tengo entendido que David tiene un solo sobrino, Derek. No quiero desconfiar de ti, pero no sé si lo que me dices es cierto. Thomas: Claro, soy hijo de un medio hermano que tenía Anna, la madre de Alex. «Bien, esto es raro. Buscaré a Alex y que me explique si es verdad o no, porque me parece muy extraño.» Carol: Lo siento, me tengo que ir, mi madre me está llamando. Pero gracias por escribir. Le diré a Alex que mandas saludos. «Veamos cómo reacciona, si fuera un mentiroso soltaría alguna estupidez.» Thomas: Claro, dile que mando saludos. Adiós. :) Bueno, reacciono con normalidad, tal vez es verdad...  Igualmente, buscaré a Alex y le preguntaré. Alex Bien, mi plan iba avanzando perfecto. Hoy antes de irnos de la escuela me encontré con Derek en la parte trasera, junto a la piscina, y me dio todo lo que le dije tenía que conseguir. Ropa nueva que guardaría especialmente para los encuentros de Thomas con Carol, «no podía usar mi ropa para estas cosas si no se daría cuenta». Una vieja foto de cuando ambos éramos niños y sabía que la tía Laura guardaba en alguna parte. Salíamos Derek y yo jugando con otro niño que conocimos una vez en un parque, el padre del niño está detrás de nosotros sentado en un banco, era la foto perfecta para demostrar que Thomas existía realmente. Unos lentes de contacto color negro, para camuflar mis ojos verdes y un pequeño dispositivo que cambiaría ligeramente mi voz a una más gruesa y profunda. Lo pudimos conseguir gracias a un amigo nuestro que trabajaba con tecnología avanzada, a simple vista parecía un pequeño pendiente redondo negro, para mi suerte usaba uno de esos hacía años, ya no lo hago, así que no levantaría sospechas. Nada más llegar a casa después de un incómodo viaje silencioso junto a Carol, a la cual estaba ignorando intencionalmente, mientras más distancia hubiera entre nosotros, mejor. Me cambié de ropa y fui directo a la piscina donde Carol no me podría ver ni escuchar, y desde ahí comencé a escribirme con ella. No me extrañó que sospechara cuando comenzamos a hablar, era muy lista para su propio bien, tendría que tener mucho cuidado si no quería ser descubierto. No pude evitar reír cuando cortó la conversación diciendo que su madre la llamaba, sabía que estábamos solos. Me di cuenta de que vendría a preguntar en cualquier momento así que apagué el teléfono y lo escondí dentro de la toalla que dejé sobre una de las sillas y me tiré al agua. Diez minutos después como había sospechado llegó Carol con el teléfono en la mano y una mirada confusa en sus ojos azules. Tuve que aguantar las ganas de reírme en su cara. Pobre ingenua de mierda, mi conejillo de indias. —Alex, ¿te puedo preguntar algo? —Decidí ignorarla y seguir nadando en la piscina. —Alex, ¿me escuchas? —dijo un poco más alto, pensando que no la podía escuchar, así que decidí detenerme y responderle. —Si Carol, ¿qué pasa? —Nadé hasta estar frente suyo. —¿Tienes algún otro primo además de Derek? —preguntó con falso desinterés en su voz, pero cambiaba su peso de un pie a otro constantemente. —¿Por qué preguntas? ¿Estás haciendo un árbol genealógico para conocer a la familia? —Me burlé. —No, es que… mmm, no sé cómo decirlo, pero… —No sabía de qué forma preguntar. Esto me estaba divirtiendo muchísimo. —Mierda —dijo en voz baja, pero la pude escuchar.  «No te rías, no te rías, no te rías.» —Tómate tu tiempo hermanita, tengo toda la tarde para ti —presioné, apurándola para que hablara de una vez. —Sé que suena raro, pero, un tal Thomas que dice ser primo tuyo me escribió ahora mismo. Según me dijo mi madre tu padre solamente tiene un sobrino, Derek, así que quería preguntarte por si es un impostor, o tal vez sea verdad —habló tan rápido que a penas la pude entender. —¿Thomas? Bueno, que yo recuerde… no me viene ningún Thomas a la memoria. —Fingí no saber de qué hablaba, me estaba gustando mucho verla tan nerviosa, retorciéndose las manos y mordiendo su labio inferior. —Sí, dijo que era hijo de un medio hermano de Anna, tu mamá. —Cuando el nombre de mi madre salió de su boca, no pude evitar tensarme con enojo por el simple hecho de que ella lo estuviese diciendo, pero rápidamente cambié mi expresión a una pensativa. —¿Hermano de mi madre? —Quedé mirando el agua fijamente, alargando más su agonía. —¡Oh, sí!, Thomy. —Al escuchar mis palabras soltó un suspiro de alivio, parecía un globo desinflándose. —Hace muchos años que no lo veo, desde que éramos unos niños, por eso no lo recordaba. Perdimos el contacto porque su padre tuvo problemas con mi padre y se mudaron lejos —dije la historia inventada y la creyó perfectamente. Trágalo todo, cariño. —¿Ah, si? Vaya, mi madre no me había dicho nada sobre esto, tal vez David no le ha contado. —Tenía que desviar su atención del tema o comenzaría a preguntar a las personas equivocadas. —Te aconsejo que no saques el asunto a conversación, ni le preguntes a mi padre. Es un tema delicado entre familia y preferimos que se mantenga así. —La dureza estaba presente en mis palabras, para que se diese cuenta de la seriedad con que le hablaba. —Claro, no pensaba indagar en sus asuntos íntimos ni nada parecido. Es que, me escribió hace un momento y no sabía que hacer —dijo apresuradamente, negando con la cabeza a la vez que hablaba. —¿Qué te escribió? —Veamos cuanto me cuenta. —Solo para darme la bienvenida, vio en las páginas de Victory High School que comenzaba en la misma escuela donde estás tú. Y, además, se enteró de la relación de mi madre con David, así que solo saludó. —No mencionó el hecho de que le había llamado hermosa, o que le había coqueteado un poco. —Bueno, cuando tenga tiempo le escribiré también. —Sabía que aún no se lo creía del todo, así que estaba esperando el momento oportuno para decirle de la foto. —Sabes, creo que tenemos uno fotografía en alguna parte donde salimos Thomy, Derek y yo. Iré a buscarla, me entró curiosidad a mí también. —Oh, eso sería muy bueno. —Suspiró aliviada. Al salir de la piscina en un salto rápido, mojé sus piernas sin querer, lo que provocó que soltara un chillido de sorpresa. —¡Alex ten más cuidado, el agua está fría! —exclamó y tarde me di cuenta de que iba a tomar la toalla donde tenía guardado el teléfono para secarse. Al levantarla este cayó al piso delante de sus pies, caminé deprisa para recogerlo, pero ella se agachó y lo tomó primero. Quedó mirándolo un momento hasta que lo arrebaté de sus manos. —Gracias por recogerlo —dije, mientras tomaba otra toalla del estante en la pared y me secaba el cabello. —¿Tu teléfono no era más grande? Creo que es igual que el mío. —Sacó el suyo para comparar los tamaños, así que caminé a la cocina y le contesté mientras tomaba una caja de jugo del refrigerador. —Sí, es que tengo dos —justifiqué, encogiéndome de hombros. Tenía que ser más cuidado, estos pequeños deslices podrían derrumbar mi plan. Desviando su atención pregunté: —Por cierto, ¿qué haremos para cenar? Mi padre le dijo al ama de llaves que viniera solo por el día, porque tu madre insistió en que ella podría hacerse cargo de la cocina en la noche. —No llevaba ni una semana viviendo en la casa y ya estaba dirigiendo al personal y dando órdenes. Y mira, no estaba aquí para hacer una mierda. —Haré yo la cena. —¿En serio? Así que sabía cocinar también, doble interesante. Carol era toda una caja de sorpresas. —Bien, mientras iré a ducharme y buscaré la foto. —Salí de la cocina directo a mi habitación, tomé mi verdadero teléfono y le envié un mensaje a Derek. Alex: Se creyó toda la historia, así que avanzaremos a la segunda parte del plan. Conquistarla. Derek: Bien. Sabía que a Derek no le gustaba mucho esta idea, pero esto era necesario, ya después todos me lo agradecerían.