Capítulo 1 Su venganza la incluía a ella

Damián Sneirs miró alrededor del gran salón lleno de gente y tuvo que obligarse a sí mismo a no bostezar. No podía soportar asistir a eventos en los que todos bebían demasiado, reían demasiado fuerte y se esforzaban demasiado por impresionar a los demás. Damián sabía que él era lo que las mujeres consideraban un verdadero partido. Demonios, una estúpida revista había hecho un reportaje sobre los solteros más codiciados de Seattle y había colocado su foto en el número uno. Se puso furioso y trató de que lo sacaran del artículo, pero su abogado soltó una tontería sobre la libertad de expresión. Desde el artículo, se le acercaron mujeres aún más materialistas. La revista enumeró su valor neto como igual al de Bill Gates. También habían dicho que era alto, moreno y guapo. Medía más de seis pies, con hombros anchos y músculos que se ondulaban por todo su cuerpo. Odiaba los gimnasios, pero corría todas las mañanas y en algún momento de la tarde también. Había descubierto a una edad temprana que correr era una gran forma de aliviar su estrés. Sabía que la segunda mejor manera de aliviar el estrés era llevar a una mujer a la cama. Sin embargo, en el momento en que terminaba con ella o con ellas, se alejaba. Hubo muchas mujeres que intentaron que se quedara, pero ninguna mantuvo su interés más tiempo del que tardó en abotonarse los pantalones. Después de que Lucía le destrozara el corazón, no estaba interesado en ninguna otra mujer. Supuso que una vez que obtuviera su venganza, pensaría en establecerse. Una mujer pasó a su lado con demasiado perfume y volvió a la realidad. Suspiró mientras tomaba una copa de vino de un mesero que pasaba. Estas fiestas se trataban de quién tenía más para ofrecer. Las mujeres estaban al acecho y los hombres estaban pescando. Él no estaba interesado. Si quería una mujer, podía tener una en cualquier momento. No estaba interesado en aspirantes a socialités superficiales. Vio pasar a un par de damas, empapadas de diamantes y vestidos escotados. Estaban tratando de llamar su atención y normalmente les alegraría el día coqueteando un poco, dándoles la impresión de que tenían una oportunidad, pero hoy no era ese día. Tenía un fuerte dolor de cabeza y estaba enojado porque lo habían convocado. - Ahí estás, chico. ¿Qué haces escondiéndote en la esquina? Daniel Sneirs, su padre, se acercó y lo interrogó. - Me pregunto por qué estoy aquí cuando prefiero estar en casa con un whisky y los pies en alto. Respondió Damián. - Estás aquí porque recibiste un recado de tu padre, osea yo. Tengo algunas cosas que discutir contigo más tarde. Dijo Daniel con su voz sensata. - ¿Y no podía esperar hasta más tarde? Preguntó Damián. - Oh, vive la vida un poco. Siempre estás tan ocupado agregando unos cuantos millones más a tu cuenta bancaria que no te detienes a oler las rosas. Lo regañó su padre. - Yo si vivo la vida papá, y mucho, diablos, estuve en Milán la semana pasada. - Estabas en Milán por negocios, eso no cuenta. Le dijo su papá, un poco exasperado. - Para mí, el momento ideal es mezclar los negocios con el placer. Le dijo Damián a su padre, moviendo las cejas. Ambos hombres se relajaron. - En serio, papá, tengo dolor de cabeza. ¿Qué es tan importante que no podía esperar hasta la mañana? Preguntó Damián. Una vez que él ganó su primer millón, mudó a su padre a la ciudad y Daniel era el director financiero de su enorme corporación. Su padre era brillante y había ayudado a que la empresa creciera aún más. Su padre pudo haber tenido varios momentos difíciles mientras Damián crecía, pero ahora era esencial para la compañía de él. - David Freeman está aquí esta noche y está hablando con algunas personas, tratando de conseguir inversores. Le respondió Daniel. Damián estaba en alerta instantánea. Buscó en el gran salón, localizando a su enemigo. Él fue quien lo convirtió en el hombre de negocios despiadado en el que se había convertido. - Es demasiado tarde para él. Mañana por la mañana su compañía será mía, sin importar lo que intente esta noche. Dijo Damián con una sonrisa burlona. Mientras Damián observaba a David, una hermosa mujer se le acercó, poniéndose de puntillas para besarlo en la mejilla. David ni siquiera se molestó en volverse y saludarla, cosa que ella no pareció notar. El hombre no notó nada a su alrededor si no tenía signos de dólar, ni siquiera a su deslumbrante hija. Los ojos de Damián se redujeron a rendijas. No había visto a Lucía en diez años y esos años habían sido muy buenos para ella. Su vestido era ceñido a la piel en la parte superior, hundiéndose tanto en la parte delantera como en la trasera. Sus curvas eran aún más pronunciadas ahora que su cuerpo había madurado. Tenía el pelo oscuro, recogido en un moño clásico, con mechones flotando alrededor de su delicado rostro. Sus ojos marrones oscuros una vez lo habían hipnotizado. Tenían una cualidad hipnótica, con su engañosa inocencia brillando y las gruesas y oscuras pestañas rodeándolos. Estaba enojado por la tensión en su estómago con solo verla. Casi lo había destruido y, sin embargo, todavía la deseaba. Sin embargo, su venganza completa la incluía a ella, por lo que la tendría en su cama nuevamente y luego ella le rogaría que no se fuera. - Me voy ahora. No progresará nada esta noche y mañana será un día ajetreado para mí. Sin embargo, agradezco que me llamaras. Dijo Damián. Luego se dio la vuelta y salió del lugar, sin mirar una vez detrás de él. Lucía vio a Damián al otro lado del salón y sus entrañas se incendiaron. Ella entrecerró los ojos con ira hacia el hombre mientras caminaba como si fuera el dueño del lugar. Ella conocía el lado más amable y gentil de él, pero ese chico se había ido hace mucho tiempo. Es posible que nunca haya existido realmente más allá de su imaginación.
Ajustes
Fondo
Tamaño de letra
-18
Desbloquear el siguiente capítulo automáticamente
Índice
Capítulo 1 Su venganza la incluía a ella Capítulo 2 Lo que nunca pasó Capítulo 3 Ahora eres tú quien no tendrá nada Capítulo 4 ¡Mi hija al menos no fue tonta y te dejó! Capítulo 5 Soy el nuevo dueño Capítulo 6 Sería un placer ver a ese hombre Capítulo 7 Eres la única aquí a la que conozco muy bien appCapítulo 8 Estrategia de poder appCapítulo 9 Convencerse a sí mismo appCapítulo 10 No saber acerca de su hijo appCapítulo 11 Te echará aún más rápido appCapítulo 12 Contribuir al resultado final appCapítulo 13 Ella fue la que lo dejó porque era pobre appCapítulo 14 He terminado appCapítulo 15 Blando de corazón appCapítulo 16 No olvidaré lo que me hizo appCapítulo 17 Sobrevivir un día más appCapítulo 18 De ti y de tu hijo bastardo appCapítulo 19 Puedes quedarte fuera de mi vida appCapítulo 20 No eres mi invitado appCapítulo 21 Un asunto de vida o muerte appCapítulo 22 Di que me deseas appCapítulo 23 La familia que siempre soñó appCapítulo 24 Me has robado nueve años de su vida appCapítulo 25 No eran pareja appCapítulo 26 Insufrible ex appCapítulo 27 ¿Por qué lo mantendrías alejado de mí? appCapítulo 28 No me importa tu dinero appCapítulo 29 Una verdadera familia appCapítulo 30 No soy tu enemigo appCapítulo 31 Un hombre de negocios tan feroz appCapítulo 32 No voy a ir a ninguna parte appCapítulo 33 No quiero ser una mantenida appCapítulo 34 Ninguna posibilidad appCapítulo 35 No era la persona fría que él había pensado appCapítulo 36 El niño es mío y podemos huir juntos appCapítulo 37 No quería que terminara la tregua appCapítulo 38 Nunca he tenido que obligar a una mujer a estar conmigo appCapítulo 39 Terminar ganando una vez más appCapítulo 40 Me cansé de esperarte appCapítulo 41 Enamorarse aún más appCapítulo 42 Eres mía ahora appCapítulo 43 El responsable de su dolor appCapítulo 44 No voy a huir ésta vez appCapítulo 45 Juntos por el resto de la vida app
Añadir a mi biblioteca
Descargar la app
Joyread Español
Siguiente capítulo
Joyread Español
UNION READ LIMITED
Room 1607, Tower 3, Phase 1 Enterprise Square 9 Sheung Yuet Road Kowloon Bay Hong Kong
Copyright © Joyread. Todos los derechos reservados