Capítulo 23 Estoy tan despedida

Ella todavía está gritando, pero ya no puedo escucharla. Poco a poco, mis ojos se cierran y me siento como si estuviera acostada en una hamaca que alguien ha movido sin aliento y soltado para girar conmigo todavía dentro. Poco a poco, me quedo dormida y estoy feliz de que el día de hoy terminará pronto. Eventualmente, toda esta semana terminará y me alegro porque no ha hecho nada más que patearme mientras estoy deprimida... de nuevo, tal vez lo pedí. Tengo la costumbre de hacer tonterías cuando no debería. Esta semana está destinada a ser un período de duelo, ¿no es así? Se supone que debo superar a mi novio de seis años, pero en cambio, me encuentro desesperadamente llenando el tiempo y pensando más en Jake que en David. Hay algo muy mal en mí... y no me importa. Lo decía en serio cuando le dije a David que no lo amaba desde hace mucho tiempo. Si soy sincera, estoy más molesta por el tiempo perdido que por la ruptura en sí. ¿Eso me hace una mala persona? ¿Es horrible para mí sentirme libre? Porque lo hago...