Capítulo 48

Lo que fuera que Brian había estado esperando, no fue lo que encontró. Por un segundo pensó que ella había desaparecido, que había salido por la ventana y se había dejado caer al jardín de abajo. Entonces encontró la cara que asomaba por detrás de la sábana que estaba apretada sobre sí misma como un escudo. Ella parecía perturbadoramente infantil, sus bonitos ojos se derretían y estaban abiertos de par en par, inseguros. Si no hubiera hecho lo que hizo pensaría que era una virgen y no una fruta madura. Pero ella era una mujer ahora, se recordó. Ella comprendió completamente bien las ramificaciones de su relación, sabía lo que sucedía entre un hombre y una mujer.