Capítulo 3

El festival de las rosas, es cada año. Amore y otras tiendas compiten por la belleza, y la fragancia de las flores que flota en el aire, y también la mejor decoración. —¡¿Jake se desmayó?! — Lily gritó en pánico, agarrando el teléfono. —¿Qué? — Emily bajó corriendo las escaleras y agarró el teléfono. —¿Cómo se desmayó? ¿Se lastimó? Por favor, estaré allí pronto. Rápidamente, colgó el teléfono, corrió escaleras arriba para sacar su bolso, y les dijo a las chicas que trabajaban en la tienda —Encárguense de todo y salió corriendo. —¡Pero ten cuidado y llámanos si necesitas algo! Lily corrió hacia la puerta y gritó a su espalda. Emily se paró en la carretera con ansiedad y tardó mucho en detener un taxi. —¡Universidad de Fordham, por favor conduce más rápido! — le dijo al conductor tan pronto como abrió la puerta del auto. Cuando llegó a la habitación de Jack, varios chicos lo rodeaban nerviosamente. —Jake —Caminó hacia la cama y miró a su hermano menor con los ojos cerrados, incapaz de controlar su dolor. —¿Por qué se desmayó? — le preguntó a su compañero de cuarto, tratando de controlar su angustia. —No sé qué pasó. Estábamos charlando cuando de repente se tiró al suelo cubriéndose el pecho. Dijo un chico de cabello rubio, todavía con temores persistentes. —¿Ha sucedido esto antes? —No, solo esta vez. Emily se sentó y apartó suavemente el cabello mojado de la frente de su hermano, su rostro estaba pálido y sus labios eran de color púrpura oscuro, esto no era algo sencillo. Que no sea nada grave, que mi hermano esté bien. Emily oró con amargura. Si vuelve su condición, ¿De dónde sacaré el dinero para salvarte? Y si no puedo salvarte, ¿cómo puedo vivir? Las lágrimas de Emily cayeron en silencio sobre las sábanas dónde se acostó su hermano. Pero al segundo siguiente recuperó la compostura. —Por favor, ayúdame a bajar a Jake, lo llevaré al hospital. —Es lo mejor. Un chico grande llegó primero y le dijo a su compañero de cuarto —Yo lo cargo, y tú lo acomodas sobre mi espalda. Todos estaban a punto de sacar a Jake de su cama, cuando parpadeó y abrió los ojos con sus largas pestañas, y se despertó. —Hermana… —Vio los ojos dolorosos y llenos de pánico de su hermana rápidamente —Lo siento... —¿Por qué te desmayaste? —Emily sostuvo la mano de su hermano con fuerza —Si no te sientes bien, ¿por qué no le dijiste a tu hermana …? —Hermana, estoy bien, de verdad —Jake trató de sentarse. —Vamos al hospital —Ella tomó un abrigo y se lo puso a su hermano —Te harás un control. —Emily—Jake tomó la mano de su hermana y se sentó, y dijo casi suplicando — No vayamos al hospital, ¿de acuerdo? Odio los hospitales y me enfermaré de verdad si voy allí. Ella lo abrazó suavemente contra ella. Ella sabía que él odiaba los hospitales, hace seis años, después de una larga estadía en el hospital, significó como una prisión para él. Siendo sometidos a pruebas constantes y permanecer en cama. Le tenía miedo. —Solo hazte un examen, también creo que no tienes ningún problema. Pero hazte un examen para tranquilizarme, ¿de acuerdo? —OK Jake asintió obedientemente. Fue al mismo hospital donde había estado muchos meses. Después de que Emily terminó los trámites, viendo a su hermano seguir al médico, se sintió débil e impotente como si se hubiera regresado el tiempo. Se acurrucó en una silla en el pasillo del hospital, rezando una y otra vez. Por favor que estés bien… Después de un rato, salió Jake. Al ver a su hermana, una sonrisa tranquilizante floreció en su rostro. —Te lo dije, no hay nada malo. —De verdad, ¿el médico dijo que no hay problema? Preguntó nerviosamente Emily. —Aunque los resultados de las pruebas aún no han salido, el médico dijo que no hay nada malo. —Entonces, ¿por qué te desmayaste? —Tal vez es porque he estado haciendo mucho ejercicio recientemente, puso sus brazos alrededor del brazo de su hermana —No haré ejercicio extenuante de ahora en adelante. "Por favor, vengan en tres días para retirar los resultados de la prueba." Una joven enfermera se acercó y les dijo. —Está bien — respondió Jake, giró la cabeza y le dijo a su hermana —Casualmente no tengo clases ese día, así que la recogeré. —No, yo lo haré —dijo ella, preocupada, solo podía sentirse tranquila cuando viera los resultados de la prueba con sus propios ojos. Desafortunadamente, había un asunto importante en Amore ese día y no podía ir al hospital, por lo que tuvo que pedirle a su hermano que lo recogiera. —¡Te dije que todo estaba bien! —Gritó Jake con felicidad mientras le entregaba el informe de laboratorio a su hermana. —De verdad, ¿realmente no hay problema? Ella leyó la hoja de prueba una y otra vez, y después de confirmar que todo era normal en la hoja, finalmente se sintió aliviada. —Sin embargo, debes prestar atención a tu cuerpo a partir de ahora. Si te sientes mal, díselo a tu hermana de inmediato. —Lo sé.