Capítulo 139 Los hombres son ridículos

"¿Por qué no te divorcias de él? Si se trata de dinero, puedo ayudarte a ganar después de que estés soltera." La voz de Ethan bajó, firme y segura. Su mirada se clavó en la mía, más intensa que antes. "No te preocupes por quedarte sin dinero. Aceptaré más trabajo si es necesario." Antes de que pudiera alejar mi mano, dejó de cubrirla y en cambio la sostuvo firmemente en la suya. Enrolló mis dedos en su palma y dijo suavemente, "Mis sentimientos por ti son complicados. Pero estoy seguro de una cosa, a lo largo de todos estos años, la que me mantuvo en pie fuiste tú."