Capítulo 33 Curso de superación de pánico

A partir de ese dia Leticia García se quedó en la hacienda, se hizo amiga de Socorro, aunque el refinamiento de una contrastaba con la sencillez de la otra, eran parecidas en cuanto al liderazgo, a menudo Leticia le hacía preguntas a Belinda con respecto a Dante, de manera sutil indagaba con respecto a la inesperada relación de su nieta con el que era en la mejor de las descripciones era un granuja, Belinda y Dante tenían una interacción sincronizada, Socorro le contó que se levantaban muy temprano y que siempre comían juntos y que cada uno se sumergía en sus propias obligaciones, Belinda siempre estaba pendiente de su abuela y la involucraba en las cosas de la hacienda, también estaba pendiente de cuando Leticia conversaba por teléfono con Brenda, esta se preocupaba por Belinda, pero no quería hablar con ella, Elena se quedó más tranquila y le dijo a Leticia que esperaría a que Belinda quisiera conversar, que la esperaría, que le aseguraba que su cariño por ella seguía intacto y esperaba pudieran volver a ser como antes, Leticia conversaba con Dante a la hora de la cena, excepto los miércoles y sábados que era dia de cita de los novios, Leticia notaba que regresaban temprano, Leticia la habían instalado en una habitación con Belinda, Johana se mudó a la habitación de Socorro. así que Belinda y Dante tenían un noviazgo bastante inocente, algo extraño en estos tiempos, Leticia le preguntó a Belinda, esta le contestó que Dante era un caballero y que la respetaba, que aún no se habían casado, a lo que Leticia contestó que ya iba siendo hora de que se casen, Belinda evadió el tema. —Belinda lo estás haciendo muy bien.