Capítulo 19 A UN SEGUNDO DE SER DESCUBIERTA
El hombre abrió sus ojos lentamente eran las 6 de la mañana, cuando escucho ruidos en el baño, se acercó y pudo distinguir que era su mujer, que ya había comenzado con las náuseas matutinas del embarazo. Se acercó a ella, y le atajo el cabello, la mujer lo miro sorprendida, pero acepto su ayuda. Gracias Kevin, dijo Alicia luego de reponerse. No tienes por qué agradecer, quiero estar en el proceso del crecimiento de mi hijo, y eso implica los cambios que te sucedan a ti. Le dijo acariciando su carita. El desayuno ya estaba servido, Alicia con tan solo olerlas corrió al baño nuevamente. Kevin que le pasa a Alicia dice Anita aunque ya sospecha no puede soportar que Kevin le oculte eso. Esta embarazada, la respuesta rápida y contundente izo pensar 2 veces a Anita lo que iba a decir. Y porque no me lo habías dicho, Alicia es mi hermana, y ese bebé será mío. Basta Anita el bebé aún no tiene nada que ver contigo, mientras este en el vientre de Alicia será de ella, tanto suyo como mío. Bien Kevin, pero no permitiré que se encariñe con mi hijo, cuando ese bebé nazca se me entregara y lo criaremos juntos. Anita así será y desayuna ya. Aunque el hombre dudaba ya de cumplir el trato como especificaba, no podía decirle a Anita eso, pero no se percató que Alicia escucho la última parte de la conversación e inconscientemente acaricio su plano vientre con tristeza en sus ojos, aunque el bebé apenas se está formando ya es una parte de ella. Alicia salió nuevamente al comedor, pero se excusó rápidamente de que no podía comer nada queriendo retirarse. Ya, pero Anita no iba a perder la oportunidad para tirar algo de su veneno. Alicia, eso es imposible tienes que comer algo, por el bien del bebé que tienes ahí, no te perdonaría si mi hijo sufriera algo por no alimentarte bien durante el embarazo. Basta Anita, Kevin se escuchaba un poco molesto. Kevin estás apoyando que no coma nada, es mi prima, también me preocupo. Deja de preocuparte por mí y déjame en paz. Le dice Alicia ya molesta. Se me calman las 2 Anita espérame en el estudio tengo algo que solucionar contigo y tu Alicia ven conmigo que necesito pedirte algo. Anita no tuvo más opción que dirigirse al estudio, mientras Alicia fue dirigida por Kevin en la cocina Preparen algo nutritivo, pero que su estómago acepte bien, fueron las órdenes del hombre para las cocineras. Mientras se daba la vuelta y miraba a Alicia, mírame necesito que te alimentes bien por nuestro bebé Alicia, por favor. Alicia no pudo soportar mantenerse indiferente por lo que asintió con la cabeza, Kevin se sintió satisfecho y beso suavemente su frente mientras se dirigía al estudio. Cuando Kevin entró al estudio, Anita quiso darle un beso, pero fue apartada por el hombre, puedes calmarte no somos adolescentes para andar besándonos cada rato. No me vengas con esas estupideces Kevin cuando antes no te importaba que te besara cada rato. Las cosas cambiaron Anita ahora estoy casado entiende eso. Es solo un maldito matrimonio de contrato no hay sentimientos de por medio, excepto la ambición de mi prima y tu deseo de tener un hijo. Pero es un matrimonio Anita, y aunque me cueste aceptarlo te estás convirtiendo en la otra frente a todos, porque no eres capaz de esperar. Kevin siempre quieres ser perfecto ante todos, pero la perfección no existe. Te equivocas no soy perfecto, Anita tampoco la busco, solo que no mereces esto, tampoco Alicia, ella es mi mujer mi esposa, ante la Ley y ante todos, mi padre siempre decía que las mujeres se respetan y también se hacen respetar. Anita no estoy viendo eso en ti, con tal de tenerme eres capaz de aguantar ser mi amante, pero yo no quiero eso, te mantendré a mi lado, pero no de la forma que tú deseas, luego del nacimiento de mi hijo y mi divorcio tú y yo estaremos juntos antes no. Anita no pudo contener las lágrimas, porque me haces esto Kevin, lloro amargamente. Llorar no cambiará nada Anita ya tomé la decisión, mientras esté casado entre tú y yo no habrá nada. Que te izo cambiar de opinión, cuando te casaste poco o nada te importaba otras cosas, excepto estar conmigo, pero ahora dices que te importa el que dirán cuando tú fuiste quien insistió en tenerme a tu lado igual después de casado. Me equivoqué Anita, eso es imposible dijo la mujer gritando, es por ella verdad, ya no me amas y la amas a ella verdad Kevin no tenía el corazón de decir algo, ya que ni el mismo entendía sus sentimientos. No Anita en mi corazón eres la única, pero por ti es que tomo esta decisión, no quiero que te señalen con el dedo por estar metida en la relación de casados. Es por eso que hoy te regreso a la casa que te regale. Estás loco Kevin, yo no me voy de aquí, que parte de que te amo no entiendes. No me alejes. No te estoy alejando, no actúes como una niña pequeña que quiere que se le cumpla un capricho conmigo no funciona eso. Ah, pero si Alicia te pide que no corras a la servidumbre lo haces rápido, y eso también fue un capricho suyo y no pudiste decirle no. Basta Anita Bonet, le respondió el hombre enojado. Muy bien Kevin te esperaré, te daré el gusto de irme, te daría el gusto de quedarte con Alicia, pero sabes que por tu culpa yo ya no sería considerada alguien que valga la pena ante los hombres de nuestra Sociedad. Anita cálmate, déjame Kevin sé que para ti soy un estorbo. Deja de decir eso Anita además no te dejaré, yo te cumpliré y me casaré contigo eso no cambiará te lo prometo. Anita sonrió en sus adentros porque Kevin es un hombre de palabra y sabe que le cumplirá. Pero su ego de mujer fue lastimado, por lo que planea que al salir de acá llamara a su caballero misterioso y tendría sexo hasta el cansancio con él. Kevin tuvo que irse en la empresa, Anita no tenía otra opción que preparar sus maletas, pero por obra del destino Alicia se le cruzó en el camino. Maldita zorra, es por ti que Kevin quiere que me largue de la casa, te odio Alicia, pero juro que no será por mucho tiempo. Estás loca, no estás calificada en tu posición de amante de exigirme algo, y estas en lo correcto si yo le di a elegir entre tú y yo, y veo que ya te diste cuenta a quien prefiere en la casa. Eres una estúpida, dijo Anita y tú una diabla la respuesta de Alicia sorprendió a Anita, ya que no recordaba porque su prima tenía tantas agallas por ahora. Alicia no cantes Victoria antes de tiempo, puedo hacer que ese engendro no llegue con vida al mundo. Este engendro como tú llamas maldita es el hijo de tu gran amor, si lo amarás a él aceptarías a su hijo, y si le haces algo a mi hijo, te juro Anita que acabaré contigo. Mira que miedo le dice la mujer en tono de burla mientras se iba. Si a mi bebé le pasa algo, Kevin seguirá casado conmigo buscando otro, y sabes que significa que estarás más tiempo de amante, y te juro que lo seduciré cuantas veces quiera poniendo en riesgo tu futuro con él, me entendiste Anita Bonet. Anita no esperaba escuchar eso, y en algo tenía razón Alicia, si ella perdía ese bebé, buscaran otro bebé juntos, y significa más tiempo entre ellos. Y eso ella no puede permitir, no de ninguna manera. Te odio Alicia dijo apretando los puños y saliendo, fue junto al chófer dando la orden de que la llevasen, pero en ese momento también Alicia salió. Ramón busca otro chófer para la dama yo te ocuparé a ti hasta la empresa. Si señora dijo el hombre sin dudar, ya que las órdenes de su jefe fueron claras y precisas si Alicia daba una orden era como el propio Kevin estaba ordenando. Estas mal yo lo solicité primero dijo Anita enojada. Querida lo solicitaste primero, pero yo soy la Anfitriona de la Villa no se trata de quien llego primero, si no de quien tiene más autoridad en este lugar y con una sonrisa arrogante Alicia se subió en la camioneta mientras el chófer le indicaba a otro compañero llevar a Anita hasta su destino. Alicia sabía que Kevin la podía regañar por esa actitud, pero también sabia que adoraba a su hijo, y aunque no quiere usar a su bebé de excusa no podía permitir más que Anita la siguiera molestando, aunque tiene cierto temor por lo dicho por su prima. La camioneta se adentró en el estacionamiento de la empresa, cuando Alicia entró todos los empleados se quedaban mirándola no podían negar la hermosura de la mujer. Buenos días, Araceli, saludo Alicia a la secretaria de su marido Señora DuPont siempre es un placer recibirla en la empresa. Gracias Araceli, avisa a Kevin que estoy acá por favor. Si señora en un momento, respondió la secretaria mientras llamaba al Presidente. Que pasa Araceli la voz del hombre siempre tan fría. Señor Presidente la señora DuPont está acá. Kevin se sorprendió, pero rápidamente dio la orden de que la dejaran pasar. Alicia entró, conociendo adentro al asistente personal de su marido. Señora Alicia un placer verla respondió el hombre llamado Cristian Tiempo sin verte respondió la mujer con una sonrisa cálida, que ante los ojos de Kevin era inapropiado porque al hombre raras veces le mostraba esa sonrisa. Kevin dijo la mujer dirigiendo su atención al hombre, volveré en la oficina, he decidido que me siento mejor dentro de la oficina no haré esfuerzos tú puedes controlar todo dijo la mujer tratando de convencer al hombre vestido totalmente de negro. Si eso te dará tranquilidad está bien, regresarás en la oficina, Alicia sonrió y agradeció, mientras se despidió y proseguía a salir de la oficina, Kevin volvió a hablar, ven siéntate acá y espérame para volver juntos ya no tengo nada que hacer. Alicia quería negarse, pero no había un porque razón por la cual lo espero obedientemente. Mientras tanto Anita realizó la llamada luego de volver a instalarse, rápidamente la llamada se conectó. Preciosa le dijo el hombre al otro lado de la línea. Quiero verte te mandaré la ubicación de mi casa. Irme yo a ese lugar es difícil ven al Hotel El Manantial habitación 150, te espero y corto la llamada. Anita no quería salir, pero su deseo estaba aumentando por lo que tomó su auto y salió. Kevin y Alicia se encontraban rumbo a la villa cuando Alicia tuvo antojo de Helado, Kevin quiso negarse al principio, pero al ver el tierno puchero que izo Alicia no pudo negarse, y se dirigieron a la mejor heladería de la Región situada frente al Hotel El Manantial. En ese momento un auto rojo con matrícula 999 venía entrando al estacionamiento, pero dicho coche fue vista por Kevin que miraba con el ceño fruncido hacia la dirección que vio el auto. Llamo a Anita, pero su celular estaba apagado, por lo que decidió pasar por alto por esta vez. Y esperando que no le mintiera. Anita entró en la habitación, con ganas de satisfacer sus necesidades sexuales sin percatarse que pudo estar a un segundo de ser descubierta
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