Capítulo 38 Mi señor
Celeste
Él duda por un momento antes de quitarse el guante de cuero. Me quedo impresionada: su mano está oscura, con partes rojizas que contrastan terriblemente con su piel pálida. Él parece avergonzado. Era algo muy extraño, jamás vi una herida así, aunque tenía una teoría.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread