Capítulo 76

Aurora camina por el jardín de la casa y con delicadeza mira una flor, Duncan había salido desde temprano para terminar sus últimos arreglos antes de marcharse por completo. El recuerdo de que él se marchara por dos meses de repente la agobia y toca una rosa la cual tenía espina y traspasa su dedo, mira sus manos al ver la sangre salir de su pulgar y en sus palmas caen sus lágrimas silenciosas. —¿que me pasa? ¿estoy llorando porque no quiero estar sola en esta casa tan grande y vacía sin él por dos meses? ¿o por qué extrañare a mi esposo?— camina hacia la piscina y se sienta suspirando, mancha su vestido blanco con gotas de sangre y la melancolía le hace estremecer el estómago, la tristeza la invade.