Capítulo 24
Al notar las emociones reprimidas de Gloria, Christine se sintió angustiada.
Gloria prosiguió, -Me humillaron, me hicieron arrastrarme por el suelo y ladrar como un perro, y me regañaron con palabras sucias, pero eso no se compara con lo que he pasado. En la cárcel, me desnudaron y me arrojaron a una jaula. La pistola de agua a alta presión apuntaba directamente a mi cuerpo desnudo. ¿Y qué? Christine, soporté un dolor insoportable. Mica murió. Murió para protegerme. Le debo tanto. Por eso, debo vivir y cumplir su sueño no realizado.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread